Si tuviese que elegir un deseo, la verdad que es que no tardaría más de un minuto:
Desearía volver a ver su rostro pegado con el mío aunque solo fuese durante un segundo, o si pudiese verle durante mas tiempo, le diría todo lo que en su día no me atreví por miedo o por lo que fuese solo sé que no lo dije. Le diría que le quiero como a nadie en el mundo, que es de las mejores personas que existe y que van a existir jamás, que nunca le voy a poder olvidar, y mucho menos sacar de mi corazón como si nada hubiese dejado, como si nunca hubiese pasado nada, como si no existiese.
Mi deseo seria poder verle una vez más, hablar con él, y sentirle cerca aunque sepa que esta lejos, sentir su respiración en mi cuello, sus manos suaves acariciando mi cara, su forma de reírse, de abrazarme o incluso de darme un beso. Ese sería y es mi deseo.
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